Este año es el segundo que estoy con mi actual equipo Guerrero Cerezo, F.S., trabajando muchísimo pero muy agusto. El equipo ha mejorado muchísimo tácticamente en cuanto a conocimientos de Fútbol Sala, la técnica es otro tema que llevamos con constancia, pero sin duda conlleva un proceso mucho más lento.
El año pasado nos costaba mucho elaborar y los conceptos defensivos se iban adquiriendo, pero sin mucha consistencia, en cuanto a intensidad, elegir el momento, etc..., este año sin embargo, estamos logrando muchas ocasiones de gol en juego de ataque posicional, lo que me agrada mucho y me hace ver que efectivamente su progresión va por el buen camino y en cuanto a la defensa, están adquiriendo lo básico y aún con numerosos fallos, cuando le dan intensidad, suplen las carencias de vigilancia, coberturas, etc... y a todos los equipos de la categoría les estamos creando muchísimos problemas.
¿Cuando viene el problema?, en los momentos o partidos delicados, cuando llegan los minutos finales, en los minutos a los que los entrenadores llamamos más stresantes, los finales. Ahí es cuando noto que tengo un equipo muy inexperto y es la gran asignatura que tengo pendiente este año, ya que no logro conseguirlo, de ahí que esté escribiendo esta entrada en mi blog, para que sirva de consejo tanto a mis jugadores, como a aquellos jugadores que sufran en sus carnes lo que a continuación describo.
¿Te pones nervioso durante un partido?
¿Te sientes inseguro porque si pierdes el balón tu entrenador te hará el cambio?
¿No te sientes importante y cuando sales a jugar solo piensas en negativo y que si fallas volverás al banquillo?
¿Juegas mejor en los entrenos que en el partido?
Pues mi consejo para ti es:
Antes que nada, dos últimas preguntas ¿el Fútbol Sala te gusta?, ¿conoces tus limitaciones?. Si te gusta el Fútbol Sala, debes aprender a disfrutar, incluso en los malos momentos, piensa que es una suerte practicar este deporte y que hay infinidad de personas en el mundo que tienen minusvalías y darían su vida por estar en tu lugar, así como que debes saber que es parte fundamental de tu progreso que conozcas tus limitaciones, para ir mejorando una a una y adquirir la correspondiente seguridad en tu juego.
Una vez que seas consciente de que en el Fútbol Sala Amateur, como mal mayor, lo máximo que puedes obtener es irte al banquillo, te aconsejo que disfrutes, que lo que entrenes y domines lo pongas en práctica durante el encuentro y sobre todo, hasta que la misma vida a través de los años y de las temporadas te de esa tranquilidad innata, que temples los nervios a través de la concentración.
No llegues a los partidos pensando en como ha quedado el Madrid o el Barcelona o el equipo que fuere o que vas a hacer cuando acabe el partido, concéntrate mientras estés en el vestuario solamente en el partido y piensa que debes hacer, en cuales han sido tus fallos para no cometerlos nuevamente y en cuales tus virtudes para ponerlas al servicio de tu equipo. Cuando el jugador se concentra y piensa en estas cosas, es como cuando estamos en la escuela o en la universidad, es como si estudiáramos y el cerebro asimila conceptos, por lo que con seguridad, al partido saldrás con todos los sentidos puestos en hacer lo que has pensado.
Si por cualquier circunstancia, en la primera acción de juego cometes el primer error, no te pongas nervioso, no pienses en que estarán pensado, solo sigue concentrado, dile a tu cerebro que no volverás a cometer ese error y actúa, juega sencillo y sal de situaciones difíciles mediante los conocimientos técnico tácticos adquiridos, deja a un lado el lucimiento personal y piensa que las jugadas no se fuerzan, llegan solas a través de la elaboración y ayuda de tu equipo. No hay mejor sustento psicológico, que ser consciente de que todos tenemos malos días y entonces debemos apoyarnos en la táctica, no falles en las jugadas fáciles, se intenso en defensa y tu entrenador seguirá confiando en tí, ahora bien, salte del partido y sigue cometiendo los mismos errores de siempre y no te estará sustituyendo tu entrenador, habrás sido tu mismo.
El pensamiento es el arma más fuerte del jugador, si estás nervioso no piensas y si no piensas no estarás capacitado para jugar.
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